lunes, 23 de diciembre de 2013

Parque Nacional Turquino: donde el entorno es prioridad



Por Pedro Mora Estrada
Fotos: Armando Yero La O
La belleza de la Sierra Maestra es insuperable
Hechizados por una naturaleza predilecta que se entrelaza con acontecimientos épicos, numerosos  turistas foráneos y campistas oriundos acuden organizadamente al indómito lomerío de la Sierra Maestra.

Los motiva, un sano disfrute espiritual sustentado en elementos históricos, topográficos, flora, fauna, cultura y los  hospitalarios habitantes, respetuosos y serviciales depositarios de llamativas anécdotas y leyendas que se pierden entre añejos tiempos, arroyos y picachos.
Llegan por senderos del ecoturismo que conducen invariablemente  hasta la cima  de sus expectativas. Escogieron visitar al Parque Nacional Turquino que desde el año 1991 satisface los exigentes anhelos de turistas e investigadores.

Es misión de la Empresa Nacional para la Protección de la Flora y la Fauna preservar ese verdadero tesoro de la naturaleza cubana, enmarcado en  uno de los ecosistemas montañosos mejor conservados del país, poseedor de admirables valores florísticos, faunísticos, hidrológicos, climáticos y paisajísticos.

El plan de manejo está dirigido a facilitar su uso y a resolver la problemática ocasionada por el hombre a lo largo de muchos años,  entre ellas la indiscriminada tala de árboles y el daño al suelo. 
Con ese fin existen las áreas de conservación, uso público, histórico-cultural, restauración, administrativa, socioeconómica y de amortiguación

Uno de los objetivo de su unidad administrativa es ‘’alcanzar una cultura general en función del mejoramiento de la calidad de vida en las comunidades vinculadas al Parque, mediante la educación ambiental, capacitación e integración de los pobladores en el uso y manejo del potencial natural, que posibilite el desarrollo del ecoturismo y las investigaciones de forma sostenible.’’

DENTRO DE SUS LIMITES ESTA LA COMANDANCIA DE LA PLATA

El parque está ubicado en la región centro oeste de la Sierra Maestra y ocupa territorios pertenecientes a los municipios de Guamá, en la provincia de Santiago de Cuba y de Bartolomé Masó, de Granma, donde radica su dirección administrativa.

En una extensión de 23 208 hectáreas terrestres y dos marinas, el parque cuenta con un medio  caracterizado por  gran endemismo y amplio presencia de especies de la flora y la fauna. Dentro de sus límites se encuentran el Pico Turquino y Pico Cuba, mayores alturas del archipiélago, las cuales motivan la presencia de ansiosos expedicionarios.

Comandancia General de La Plata
Dentro los límites del área protegida se encuentra la Comandancia General del Ejército Rebelde de La Plata, con edificaciones, objetos y documentos relacionados con nuestra historia, y los sitios donde tuvo lugar la toma del cuartel de La Plata, las batallas de Santo Domingo y lo combates de Purialón y Llanos del Infierno. Un área donde se vistió de gloria la guerrilla liderada por el Comandante en Jefe, Fidel Castro Ruz.

Por estar enclavada en las principales alturas del país, esta zona presenta cambios bruscos de las variables meteorológicas. En verano las temperaturas del aire oscilan desde los 30 grados, en las costas, hasta los 16 en las alturas. En el invierno han descendido a cinco grados en  Pico Turquino, Pico Cuba y Aguada de Joaquín.

Cuando el clima tiene comportamiento normal, es frecuente observar nublados casi todo el año en las elevaciones superiores y nieblas intermitentes sobre el suelo después de los mil metros que dan un toque de singular belleza al paisaje. Las mayores precipitaciones aparecen de los 600 a 1 900 metros de altura y el promedio anual de días de lluvias históricamente ha sido entre 70 y 140,  zona de alto comportamiento de ese indicador.

En la vertiente norte del parque  nacen los ríos Yara, Santana de la Maestra y arroyo Naranjo, y en la sur  Tío Pedro, Turquino, La Plata, Jigüe, Palma Mocha y los arroyos Las Cuevas y Cabrera.

UN TESORO DE LA NATURALEZA

La flora de este lugar revela un amplio endemismo y, de la representativa, crecen entre otros  majagua, azulejo, copal, júcaro, cuaba y Pino de la Maestra. Como especies a menazadas están presente: juniperussaxicola, prothiumcubensis, tabebuiaoligolephis, talaumaminor  y magnolia cubensis.

Los helechos gigantes dan un toque distintivo al parque
La fauna es pródiga y entre las aves se reportan alrededor de 80 especies. De los mamíferos sobresalen las jutías conga y calabari objeto de la caza furtiva durante muchos años. También se ha reportado la existencia del Trichechusmanatu (Manatí) en la franja costera.

Resulta meritorio el progreso de labor de educación ambientalista  con una población cercana a las 2000 personas que habitan el lugar, distribuidos en 386 núcleos familiares. Muchos de ellos residen en los asentamientos denominados Santo Domingo, La Platica, Pueblo Nuevo, La Jeringa, El Jubal y Las Cuevas.

Importante rol desempeñan en ese sentido ,las escuelas primarias de estos asentamientos las cuales a la vez que preparan a los niños  en el cuidado del medio, los convierte en valiosos difusores de esos conocimientos con los restantes nativos y visitantes. Los pequeñines han demostrado ser verdaderos guardianes del entorno.

El desarrollo técnico y administrativo, dirigido a una mejora explotación,  ha conllevado al  diseño de unidades zonales de conservación en los lugares conocidos como Santo Domingo, La Platica, Jiménez, Aguada de Joaquín y Las Cuevas las cuales cuentan con un jefe, un técnico, un económico y trabajadores de la conservación.

¿CÓMO LLEGAR A LAS CUMBRES?

Las visitas al lugar son organizadas coordinadamente con la unidad administrativa para el manejo y  con la representación de la Empresa Flora y Fauna de Granma. Las ofertas de alojamiento las garantiza el MINTUR y entre estas se cuentan los hoteles Guacanayabo, Sierra Maestra, Marea del Portillo y Farallón del Caribe; las Villas Santo Domingo y Balcón de la Sierra y varias bases de campismo.

Quienes acuden allí tienen la obligación de cumplir numerosas regulaciones, entre estas, está prohibido fumar,  arrojar material biodegradable, crear ruidos, talar, cazar y pescar. Los recorridos por senderos deben realizarse a pies acompañados de los guías oficiales y nunca en número superior a 20 personas y no se podrán realizar trabajos de investigación científica sin los contratos y licencias establecidas por la Empresa.

Desde su creación en el año 1991 y para orgullo del país el Parque Nacional Turquino desempeña una actividad fundamental en la preservación de un ecosistema atractivo y bien conservado. Residentes en el lugar, campistas, turistas y científicos pueden ofrecer valiosos testimonios de esa realidad que se logra por ser prioridad permanente del Estado cubano.

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